2019

¡¡¡Dianaaaa…hijaaa!!!

-¡Ay… dónde te habrás, escondido niña!

-¡Madre que costumbre, tienes…! cuándo aceptarás que Diana es ya mujer y tiene más de un sentido para cuidarse.

-Ya sé, pero me preocupa que su optimismo, adobado de su alegría impetuosa y curiosa, la hagan caer en alguna de las múltiples trampas, que, tantas veces, se encuentran en sitios oscuros y recónditos del bosque…

-Tranquila, aún en presencia del miedo, Diana, sabe discernir. Ya tiene mucha historia y, en ella, grandes experiencias, que son como pies o garras de gato que le sirven, tanto para agarrarse y no caer, como para dar el salto necesario que la saquen de donde no quiera estar, confía, madre…

- Sí…, la verdad, es que es única dando la vuelta a todo lo que sea necesario. ¿Recuerdas aquella vez que le picó una abeja y dijo que fue sin querer y al preguntarle tú que, cómo sabía eso; contestó que si lo hubiera hecho queriendo hubiera avisado, como es costumbre, al resto de compañeras…?

-lo recuerdo, claro que lo recuerdo, como dices, ella lo convierte todo en algo positivo, “para aprender o desaprender” le gusta decir.

-Sí, como le gusta decir y… ¡cómo le gusta hablar, jaja! ¡Sabes? Cuando era pequeña solía decir que en otra vida fue cotorra y que en esta, aún le quedaban costumbres de la anterior.

-¡¡¡Diaanaaa…, hija, pero escúchame, por favor!!!

-Por cierto, madre, la última vez que te pregunté el porqué le pusiste ese nombre…

- ya te dije que se lo puse porque es muy hermoso y nada más…

-pues yo te vuelvo a repetir que te conozco muy bien y sé cuándo ocultas algo… sé que hay algo más. Por favor, te suplico que lo compartas conmigo.

-Bueeno, pesada… nunca lo he dicho porque me da algo de pudor, pero vale, te lo cuento:

-verás, cuando imaginé nombres que le fueran bien a su carita, luminosa, que tanto me llenaba, al mirarla, y encontré el significado de ese nombre, supe sin dudar, que ya lo había encontrado… no busqué más.

-Y, dime ¿qué bello significado oculta Diana?

-Diana significa, literalmente: “Llena de luz divina”

-¡Gracias, madre, te agradezco mucho que me lo hayas dicho… hacía mucho que esperaba escucharlo!

-¡vale; pero ahora,¡ por favor,! sigamos buscándola. Está cayendo la tarde y no quiero ni pensar que se oculte el sol y, Diana, siga perdida en el bosque... por mucho que le gusten a ella los árboles, los animalillos, las flores y demás cortejo… ¡vamos!

-¡¡¡Diaanaaa…por favor, escúchame!

-¡Te oí, madre…gracias, ya voy a tu encuentro!

(Flora)

https://youtu.be/dXApBvgUNBQ