"El periódico informó
Que el tiempo cambiará
Hay nubes negras en el cielo
Y los pájaros allí no volarán ya más
Por qué será"

El título de esta entrada y las letras de arriba, hacen referencia a una antigua canción de, Gigliola Cinquetti.

A mí nunca me desagradó la lluvia, al contrario, siempre la he mirado como una bendición del cielo para la tierra ( que soy rama de labriego) así como para todos los seres que la habitamos. E incluso, como en la foto que comparto, hace posible tener el cielo a nuestros pies jeje. Pero claro, cuando la lluvia es tan persistente o torrencial que llega a ser riada que inunda y se lleva por delante todo lo que que encuentra a su paso, pues ya no es nada agradable sino trágico. Algo bien distinto de ese maná purificador  y nutriente que siempre he sentido que es.

Lo mismo, pensaba de las lágrimas, que tanto bien pueden traer a nuestro espíritu en determinados momentos y que sin embargo cuando se abusa de ellas, pueden llegar a convertir en ciego a su protagonista.

Como leemos tantas veces, "todo en su justa medida"

también, permitid que comparta esa hermosa frase de R. Tagore que dice:

"Si lloras porque no puedes ver el sol, las lágrimas te impedirán ver las estrellas"

Sinceramente, siento que; tanto las alegrías como las tristezas han de ser serenas, pues cuando nos pasamos en cualquier sentido, la vida intenta devolvernos al sitio de equilibrio y casi siempre suele doler el medio y el tiempo empleado.

Si algo llega a pasarse de la medida recomendable, como por ejemplo ha sucedido con las lluvias estos días, habrá que aprender y rectificar algo para que la próxima vez que las tormentas sean tan fuertes no nos lleven por delante... ni a nosotros ni a nuestro hogar.

Con estos acontecimientos como más de afuera, como con los otros (acontecimientos) de más de adentro... ya que suceden (y sucederán), reflexionemos e  intentemos discernir para ir previniendo en lo posible, quiero decir dentro de nuestras posibilidades, tomando la responsabilidad que nos corresponde (que a veces, es muuucha) ...

esto es; si un acontecimiento o suceso derrumba nuestro castillo, descansemos, retomemos fuerza y pongámonos manos a la obra nosotros. Y digo, nosotros, tomemos las riendas y decidamos dónde y cómo levantar la nueva fortaleza, nosotros... siempre habrá otros dispuestos a ayudarnos con su cariño, con sus manos, con su tiempo, con su apoyo... pero, como digo, tomando la responsabilidad de de nuestro bienestar nosotros sin echarnos en brazos de otros,... no es que  esos brazos no sean acogedores, no...

lo digo, porque nosotros no somos sus niños  ni ellos son nuestros padres.

Si para nuestra dicha o bienestar dependemos de  los brazos de otros, siempre estaremos en modo espera y puede que nuestro tiempo termine antes de que, el cartero, llegue a nuestra casa  a dejarnos "el nuevo juguete."

El cielo se nubla muchas veces y lo vemos gris;  pero sabemos que el cielo es azul, esa es su verdad y su esencia, no se ha perdido su bello color, solo está oculto, y hemos de seguir conscientes de que sigue siendo azul, aunque en ciertos momentos no podamos verlo así.

si te miras al espejo una mañana y ves tus ojos grises, recuerda;

tus ojos son azules; como el cielo.

https://youtu.be/a502RejLz8s